¿Algo de holgura de cara a las vacaciones? El impacto del dólar a $ 1.000 en las bencinas sería acotado

El alza del dólar ha sido una de las noticias económicas que han marcado el inicio del 2025.

En la jornada de este jueves el tipo de cambio cerró sobre los $ 1.000, y logró alcanzar su nivel más alto desde mediados de 2022.

Los últimos movimientos del dólar en Chile no han dejado indiferente a nadie, menos al mercado financiero local, que mira con atención los posibles efectos que pueda tener un precio del dólar cercano a los $ 1.000.

Una de esas secuelas podría verse en los precios de las bencinas, aunque sería acotada, creen especialistas.

En un escenario en que el precio spot del petróleo Brent se encuentra sobre los US$ 74 el barril, mientras que el tipo de cambio nominal alcanza niveles sobre los $ 990, lo esperable es que el precio de las bencinas aumente, planteó el economista senior del Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales (OCEC-UDP), Juan Ortiz.

Para la próxima semana, el experto espera un aumento en las gasolinas en torno a $ 28 por litro y de $ 22 por litro aproximadamente para el diésel.

Pero hacia adelante, el panorama se ve más amigable. “En la práctica tenemos un tipo de cambio que ha tendido a estabilizarse, mientras que se observa una leve tendencia al alza del precio del petróleo Brent, la cual responde a factores de carácter coyuntural, más que un alza sistemática por fundamentales. Por lo tanto, lo que debería observarse bajo este escenario es una estabilización del precio de las gasolina y el diésel, no un rally al alza”, explicó Ortiz.

Con respecto a los precios esperados para los meses de enero y febrero, en el OCEC-UDP prevén que el precio de las gasolinas de 93 y 97 se mantenga en niveles similares al verano pasado, mientras que en el caso del diésel el precio sería en torno a un 4% menor en enero y febrero de 2025 respecto al mismo periodo del año anterior.

Efecto del dólar en la inflación

Otro impacto de una divisa norteamericana cercana a los $ 1.000 podría traducirse en una mayor presión en los precios internos.

“Las estimaciones históricas del impacto de la depreciación del tipo de cambio en la inflación (...) indican que aproximadamente el 5% de la depreciación se traduce en inflación. Sin embargo, desde 2019, algunos episodios han mostrado un efecto que prácticamente se ha duplicado”, explicó el economista senior de Inversiones Security, Eduardo Salas.

Por otro lado, el economista jefe de Coopeuch, Felipe Ramírez, planteó que una depreciación del peso tiene un efecto directo en mayor inflación de corto plazo, además de tener efectos indirectos, como los de segunda vuelta. “Que estemos llegando a un dólar cerca de $ 1.000 se verá de forma relativamente rápida en la inflación, sobre todo en la parte volátil del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que tiende a responder de forma inmediata”, dijo.

De todas maneras, el efecto no debería ser muy grande, ya que el movimiento es mayormente de naturaleza externa, sumado al hecho que la débil demanda interna podría frenar el traspaso de empresas a consumidores, agregó Ramírez.

Para que el tipo de cambio tenga un impacto significativo en la inflación, debiera quedarse en torno a los $ 1.000 durante la primera parte de 2025, mencionó, a su vez, el economista senior de Bci Estudios, Juan Ángel San Martín.